El Olor: una buena estrategia de marketing.

Por: Eddy Aguilar

Casi todas la empresas utilizan estímulos visuales ( logotipos, colores, símbolos, tipografías) y sonoros (jingles, locución, sonidos) para crear su identidad. Tienen un nombre que los identifican y que, por regla general, es único. Algunas tienen, incluso, una identidad corporativa completa, con las indicaciones precisas de cómo se emplea. Pero, hoy en día, existen empresas que van más allá. Son empresas que están empleando otro estimulo además de los anteriores para definirse y presentarse ante sus consumidores: el aroma.

Son empresas que han creado y registrado su propio olor, de forma tal que, visites la oficina o al local que visites, en cualquier lugar del mundo, siempre huele igual. Huele a empresa o huele al producto.

Algunas, además, lo emplean como una herramienta de marketing; han realizado estudios para conocer aquellos olores que incitan mas la compra y los han hecho suyos. ¿Sabias que el olor de vacaciones estimulan las ventas? Bueno, tiene su lógica, ¿no? En vacaciones todos somos más esplendidos con los gastos, lo supervisamos menos. Para algunos las vacaciones huelen a cremas, para otros a hierbas, para otros a yodo de mar.

En definitiva lo que algunas empresas están utilizando  además de la vista y el odio, tácticas como el sentido del olfato, que es uno de los estímulos que mas emociones despierta. ¿Quien no ha olido un aroma que no le haya hecho recordar a algún lugar, a alguna persona, o algún momento en particular? Y es que los aromas tienen la capacidad de evocar emociones, siendo algunas de estas las más poderosas de causar comportamientos, algunos “irracionales”, ya que este sentido crea: felicidad, alegría, bienestar y tristezas entre otras. Enfadado, triste o alegre, igual sales de compras!!

Lo que algunas empresas de marketing están tratando de hacer es construir un espacio olfativo, para que de algún modo resulte en una acción de compra. En realidad, el olfato, es parte de la experiencia de la marca, quizás la más olvidada, no por ello la menos importante.  Nunca olvidemos que para vender, debemos ofrecer una experiencia única. A ver si ahora pensamos en una buena estrategia de olfato.